Home Random Page


CATEGORIES:

BiologyChemistryConstructionCultureEcologyEconomyElectronicsFinanceGeographyHistoryInformaticsLawMathematicsMechanicsMedicineOtherPedagogyPhilosophyPhysicsPolicyPsychologySociologySportTourism






TRES METROS SOBRE EL CIELO 9 page

‘Ahhh.’ Pallina deja el vaso en la mesa. ‘Esta si que la necesitaba.’

Y se limpia la boca rozándola violentamente con la servilleta. Cada tanto le gusta asumir ese aire de dura. Babi abre la canasta de los panecitos. Saca uno ligeramente caliente y lo parte. Después mira alrededor del local. Grupos de chicas hablando divertidas, haciendo pequeños triángulos de pizzas con tomares. Chicos refinados se obstinan de comer con el tenedor las aceitunas. Una joven pareja habla divertida esperando ser servidos. Ella es una bella chica de cabellos oscuros, no muy largos. El le sirve gentilmente de beber. Esta de espaldas. Babi no sabe porque, pero le parece conocido. Un camarero le pasa cerca. El chico lo para. Le pregunta que ha pasado con sus pizzas. Babi lo mira a la cara. Es Marzo. El pan se le rompe entre las manos mientras algo mas se rompe adentro. Recuerdos, emociones, momentos bellísimos, frases dulces susurradas comienzan a girar en un vértice de ilusión. Babi suspira. Pallina se da cuenta.

‘Que pasa?’

Babi no puede hablar. Le indica el fondo del lugar. Pallina se voltea. El camarero se aleja de una mesa. Pallina lo ve. Marco esta allí, le sonríe a una chica sentada frente a el. Le acaricia la mano, confiado de la llegada de las pizzas y sobretodo de lo siguiente en la velada. Pallina se voltea de nuevo hacia Babi.

‘Que hijo de perra. Más que una frase común. Los hombres son de verdad todos iguales! Examen de biología no? Se esta preparando par anatomía!’ Babi en silencio dobla la cabeza hacia abajo. Una lagrima ingenua desliza por sus cachetes. Se para un momento sobre el mentón indecisa, después, empujada por el dolor, da un salto al vacío.

Pallina mira lamentada a la amiga.

‘Disculpa, no quise.’

Se saca del bolsillo del pantalón una bandana colorada y se la pasa.

‘Toma, no es la indicada para la situación, quizás muy alegre, pero es mejor que nada.’

Babi cae en una risa extraña acompañada por un poco de llanto. Después se limpia las lagrimas y la nariz. Sus ojos limpios, ligeramente enrojecidos, vuelven a mirar a su amiga. Babi se ríe de nuevo. En realidad suena como un sollozo. Pallina le acaricia la barbilla, quitando otra lagrima indecisa.

‘Anda no seas así, no se lo merece ese gusano. Cuando va a conseguir una como tu? Es el que debería llorar. No sabe lo que perdió. Ahora esta maldecido a tener salir con chicas como esa.’

Pallina se voltea una vez mas a mirar a la mesa de Marco. También lo hace Babi. Le da una puntada en el estomago. La búsqueda del tesoro. Las caminatas en Villa Glori, los besos en el atardecer, mirarse a los ojos y decirse te amo. Imágenes dulcemente ligeras desaparecen rotas por un viento de tristeza. Babi trata de sonreír.

‘Bueno, tan fea no me parece.’

Pallina mueve la cabeza. Babi es increíble, hasta en esta situación no puede dejar se ser sincera. Babi agarra la cerveza y da un sorbo largo. Después deja el vaso en la mesa y se limpia violentamente la boca con la servilleta igual que como Pallina hizo.



‘Dios, como lo odio.’

‘Eso! Así me gustas. Debemos castigarlo!’ Pallina golpea el vaso de la amiga, después las dos terminan con la cerveza en un único y ultimo trago. Babi, ligeramente confundida, no habituada a beber y a todo el resto, sonríe decidida a la amiga.

‘Tienes razón, se las haré pagar! Tengo una idea. Vayamos donde Fabio!’

Marco ríe divertido sirviéndole a la chica del frió vino Galestro. Sabe divertir a una chica casi lo mismo que como no sabe elegir un buen vino.

Esa noche la Nueva Florentina puede estar orgullosa. Nunca había tenido un mesonero tan lindo. Una mesonera, para ser exactos. Babi avanza entre las mesas con las pizzas en mano. No tiene dudas. Esa de la mozzarella sin aliños es para Marco. Cuantas veces la escucho ordenarlas. Cuantas veces con amor le hizo probar un pedazo, llevándolo a su boca.

Otra puntada. Decide no pensar. Se voltea. Fabio y Pallina están cerca de la caja. Le sonríen apoyándola desde lejos. Babi toma fuerzas. Esta molesta. La cerveza era buena y la esta ayudando a llegar a la mesa de Marco.

‘Esta es para ella.’

Pone la pizza blanca de jamón con poco aceite a la chica que la mira sorprendida.

‘Y esta es para ti, gusano!’ Marco no le da tiempo de sorprenderse. La mozzarella sin aliños le cae en la cabeza con todo el tomate, mientras que la masa caliente, quemándolo se transforma en un incomodo sombrero. Fabio y Pallina comienzan a reír en un aplauso, seguidos por todo el restaurante. Babi, ligeramente ebria, se inclina agradeciendo. Después se aleja con Pallina bajo el brazo seguida por divertidos comentarios de los presentes y la mirada estupida de la acompañante.

Regresan en la Vespa en silencio. Babi se aguanta abrazada fuerte a Pallina. Pero no es miedo. Por la calle hay mucho menos tráfico. Con la cabeza apoyada en la espalda de la amiga mira los árboles desfilar frente a ella, las luces rojas y blancas de carros a lo lejos. Un autobús naranja le pasa cerca. Cierra los ojos. Un escalofrío la toma de sorpresa, después la abandona. Siente frío y calor y se siente sola. Siempre en silencio llegan debajo de su casa. Babi baja de la Vespa.

‘Gracias Pallina.’

‘De que? No he hecho nada.’

Babi le sonríe. ‘La cerveza estaba buenísima. Mañana en la escuela te brindo la merienda. Debemos festejar.’

‘Festejar que?’

‘La libertad completa.’ Pallina la abraza. Babi cierra los ojos. Se le sale un sollozo, después se separa y se aleja. Pallina la mira subir las escaleras corriendo y desaparecer dentro del portón. Después enciende la Vespa y se aleja en la noche. Mas tarde Babi, mientras se quita la ropa, saca el dinero de los bolsillos de los jeans. Cuando mete la mano para ver que hay todavía algo más ahí, queda sorprendida. Entre tantas lagrimas, sale una sonrisa. El gancho de Pallina con los corazones de colores esta ahí. Se lo metió ella, cuando estaban abrazadas.

Un pequeño regalo para animarla, para hacerla sonreír. Lo ha logrado. Pallina es verdaderamente una amiga. Marco, sin embargo, fue verdaderamente un idiota. Babi sonríe poniéndose el pijama. En toda esta tragedia piensa que hay algo de divertido. Si hubiéramos ido como siempre a Baffetto nunca lo hubiéramos atrapado. Babi se lava los dientes. Que extraño, justo esta noche, decidimos ir a la Nueva Fiorentina. Babi se mete bajo las sabanas. Si, Marco fue un idiota, y espero que lo sea por toda su vida.

Pallina gira a la derecha. Decide pasar saludando a su amigo Dema.

Un gato atraviesa la calle. No mira si es negro o no. Pallina no cree en la suerte. Ella prefiere miles de veces la pizza de Baffetto que el calzone de la Nueva Fiorentina. No la cambiaria por nada en el mundo. Pero esa noche, cuando Fabio la llamo diciéndole que ahí estaba el novio de Babi con otra, no tuvo dudas. Era la ocasión que esperaba desde hace tiempo. Supo muchas historias acerca de las aventuras de Marco. No pueden ser solo rumores. Pero si se las hubiera contado, estaba segura que Babi no le hubiera creído. O quizás si. Y ahí se hubiera arruinado una amistad. Mejor echarle la culpa al destino. Pallina llama a Dema por el intercomunicador. Le responde una voz somnolienta.

‘Si, quien es?’

‘Pallina. Todo esta hecho.’

‘Lo atraparon?’

‘In fraganti! Como una rata con el queso en la boca o mejor como un gusano con la pizza en la cabeza.’

‘Porque, que sucedió?’

‘Si bajas te cuento.’

‘Y como lo tomo Babi?’

‘Malito…’

‘Espera, me visto y bajo.’

Pallina se peina hacia atrás los cabellos. Solo por un momento extraña su gancho de cabello. Pobre Babi, pero mejor así. Quizás sufriría un poco, pero mejor ahora que después. Cuando hubiera estado más enamorada. Rápido regresara a estar alegre. Y la sonrisa de una amiga vale mucho más que un gancho, mucho más que una pizza margarita. Aun si es de Baffetto.

 

Bajo la ducha Babi se peina los cabellos llenos de crema. El 103.10 de la radio transmite los últimos éxitos americanos. Anastacia subió al tercer puesto. Babi tira la cabeza hacia atrás llevada por ese lento correr debajo de la ducha. Una cascada de agua ligera se lleva la crema, deslizando por su cara, tocándole sus gestos, la suave piel.

Alguno toca a la puerta.

‘Babi… te quieren en el teléfono.’

Es Daniela.

‘Ya voy.’ Agarra rápido una toalla y va a la puerta. Daniela le da el inalámbrico.

‘Habla rápido que espero la llamada de Andrea.’ Babi se encierra de nuevo en el baño y se sienta en el suave cobertor del inodoro.

La voz de Pallina es sorprendente.

‘Estabas bajo la ducha?’

‘Naturalmente, ni no entonces no habrías llamado! Que es tan urgente?’

‘Me llamo Pollo hace diez segundos. Dijo que le fue buenísimo conmigo. Se disculpo por lo que paso en el restaurante y dice que me quiere ver. Me pidió que esta noche fuera con el a las carreras.’

‘Que carreras?’

‘Esta noche van unos cuantos a la avenida La Olímpica con las motos y compiten. Velocidad, sobre una sola rueda en dos. Recuerdas, que Francesca contó que fue. Dijo que es genial. Ella fue una groupie…!’

‘Groupie?’

‘Si, esas que van detrás las llaman así porque se montan con una correa y se amarran así al que maneja. La regla es que deben estar de espaldas.’

‘Volteados de espaldas? Pallina pero que, te volviste cretina? Casi me lamento haberme sacrificado por ti…’

‘Sacrificada como?’

‘Como que como? La nota y todo eso!’

‘La estas haciendo fastidiosa esa historia de la nota!’

‘Mientras tanto estoy castigada y no puedo salir hasta el lunes.’

‘Esta bien, si nunca te pedí que vinieras conmigo. Solo quería un consejo. Que dices, voy?’

‘Ir a ver a esos que corren es aun mas estupido que ir a correr con la moto. Haz como te parezca.’

‘Quizás tienes razón. A propósito. Le dije a Dema que soy novia de Pollo. Estas contenta?’

‘Yo? A mí que me importa. Es tu amigo. Solo te dije que, según yo, si se enterara por otro, se iba a poner mal!’

‘Si, entendí. Pero estuvo bien. Hasta me pareció feliz. Viste que te equivocaste. No es cierto que esta enamorado de mi.’

Babi se acerca al espejo. Con la toalla quita un poco de vapor. Aparece su imagen con el teléfono en mano y la cara molesta. A veces Pallina es tan estresante.

‘Bueno, mejor así no?’

‘Sabes que te digo, Babi? Me convenciste. No voy a las carreras.’

‘Así es! Después hablamos.’

Babi sale del baño. Pasa frente a Daniela y le regresa el teléfono. Daniela no dice anda, pero parece molesta, como si quisiera decir que la hermana tardo mucho con el teléfono. Babi va a su cuarto y se seca los cabellos. Entra Daniela con el teléfono. ‘Es Dema. Es inútil decir que va lo mismo que antes.’

‘Hola Dema, como estas?’

‘Malisimo.’

Babi escucha en silencio. Parece casi ‘una emoción para siempre’, la canción de Eros, fuera escrita para el. ‘Quisiera poder recordarte así…’ pero en que modo, si no tiene nada que recordar? Babi renuncia a decirle. También porque Dema le hace miles preguntes.

‘Pero como, después de todo el tiempo que he pasado tras ella, va a salir con este? Y quien es ese?’

‘Se llama Pollo, no se nada mas.’

‘Pollo? Que nombre! Que espera conseguir? Es un violento, uno de los ladrones que vinieron la otra noche a la fiesta de Roberta! Bella gente, y Pallina esta enamorada!

‘Bah, enamorada Dema… le gustara!’

‘No, no, enamorada. Me lo dijo ella!’

‘Sabes cuantas cosas dice Pallina no? La conoces mejor que yo. Esta noche, por ejemplo, quería ir a ver las carreras en la Olímpica… cinco segundos después cambio de idea. Viste como es? Quizás dentro de un poco se dará cuenta del error que hizo y se arrepiente. Arriba, Dema, veras que saldrá así.’

Dema se queda en silencio. Ha creído sus palabras o quizás ha querido creerlas. Pobrecito, piensa Babi. Y menos mal q no estaba enamorado!

‘Si, quizás tienes razón. Tal vez todo salga así.’

‘Ya veras, Dema, es cuestión de tiempo.’

‘Si, esperemos solo que no se tarde mucho.’ Después trata de parecer más animado. ‘Babi, te lo pido, no le digas a Pallina de esta llamada!’

‘Claro, y anímate, ok?’

‘Si, gracias.’ Cortan.

Entra Daniela.

‘No lo creo, Pallina es novia de Pollo, que loco! Y Dema naturalmente esta destruido!’

‘Si, pobrecito, esta detrás de ella desde hace una vida.’

‘No tiene esperanzas! Es el clásico amigo de las chicas.’

Después de esta dura opinión Daniela se aleja con el teléfono, pero no le da tiempo a salir del cuarto y vuelve a sonar.

‘Alo. Si, hola, ya te la paso. Babi te pido, no tardes una hora.’

‘Quien es?’

‘Pallina.’

‘Tratare!’ Babi agarra el teléfono.

‘Ya terminaste con Pollo?’

‘No!’

‘Mala suerte…’

‘Con quien hablabas que salía ocupado?’

‘Con Dema, esta mal.’

‘No!’

‘Si, lo tomo malísimo! Pobrecito, me dijo que no te dijera, haz como que no sabes nada, ok?’

‘Quizás no debí decirle que estaba con Pollo.’

‘Pero que dices Pallina, si se enteraba después iba a ser peor.’

‘Podría esperar a decirle al final.’

‘Al final de que? Podrías no haberte hecho novia y ya.’

‘No toquemos este tema. Entonces, he decidido que en la vida es mucho mas divertido ser cretino…’

‘Aja, entonces…?’

‘Entonces, voy a las carreras.’

Babi mueve la cabeza. Los cabellos ahora se están secando solos.

‘Bien, diviértete.’

‘Me llamo Pollo y me viene a buscar en un rato. Pero que dices, según tu debería ir y divertirme o hacerme de la que mira las carreras y se fastidia un poco?’

Esto es mucho. Babi explota.

‘Escucha Pallina. Ve a las carreras, súbete a las motos, corre con ellas, ten algo con todos los violentos de este mundo pero, te ruego, no te vuelvas actriz.’

Pallina comienza a reír.

‘Tienes razón. Escucha, me debes hacer un último favor. No se a que hora regresare de las carreras, le dije a mi madre que voy a dormir en tu casa.’

‘Y si llama tu mama?’

‘Ella nunca me llama… y por cierto, debes dejarme las llaves debajo de la alfombra de la puerta. En el puesto de siempre.’

‘Esta bien.’

‘No te olvides! Pobre Dema! Según tu, debo hacer algo?’

‘Pallina me parece que por hoy has hecho bastante.’

Babi apaga el teléfono. Daniela casi se lo quita de las manos.

‘Por suerte te pedí que te quedaras poco, eh.’

‘Que puedo hacer! Escuchaste lo que ha pasado, no? Te lo pido, no le digas a nadie de Pollo y Pallina.’

‘A quien quieres que se lo diga?’

El teléfono suena de nuevo. Es Giulia.

‘Se puede saber quien se cayo dentro del teléfono?’

‘Hola Giuli. Lo siento, era mi hermana.’

Daniela va a su cuarto. Espera apenas que se cierre la puerta, después no resiste.

‘Giulia no sabes la noticia. Pallina es novia de Pollo!’

‘No!’

‘Si! Dema esta mal, pero te pido, no le digas a nadie!’

‘No claro, imaginate.’ Giulia escucha el resto de la historia, ya pensando que le dirían más tarde Giovanna y Stefania.

Babi sale de su cuarto. Tiene una camisa rosa pastel, abajo un pijama azul y en los pies pantuflas. Después de la ducha se recupero de la fatiga de trotar, pero no esta feliz del todo. Aquella noche la dieta no le permite más que una mísera manzana verde. Atraviesa el corredor. Justo en ese momento siente girar las llaves en la cerradura de la puerta. Su padre.

‘Papa!’ Babi corre a encontrarlo.

‘Babi.’

Su padre esta molesto. Babi se para.

‘Que paso? No me digas que no metí bien la Vespa, que no pudiste entrar en el garaje…’

‘Que me importa la Vespa! Hoy vinieron los Accado a verme.’

Con esas palabras Babi palidece. Como no lo pensó antes? Debía haberle contado todo lo que paso a sus padres.

Raffaella, que apenas había terminado de lavar dos manzanas blancas preparando así la cena, llega a la sala.

‘Que quieren de ti los Accado? Que paso? Que tiene que ver Babi con todo?’

Claudio mira a su hija.

‘No lo se. Dile tu Babi, que tienes q ver?’

‘Yo? Yo no tengo que ver con nada!’

Daniela aparece en la puerta.

 

 

‘Es cierto. Ella no tiene nada que ver!’ Raffaella se voltea hacia Daniela.

‘Quedate callada, nadie te pregunto.’

Claudio agarra a Babi por un brazo.

‘Quizás no será culpa tuya, pero el que estaba conmigo si tiene que ver! Accado esta en el hospital. Tiene el seto nasal fracturado en dos puntos. El hueso le ha entrado, el medico le dijo que bastaba medio centímetro mas para que le entrara en el cerebro.’

Babi se queda en silencio. Claudio la mira. Su hija se sorprende.

Le suelta el brazo. ‘Quizás no has entendido Babi, medio centímetro mas y Accado moría…’

Babi esta aterrada. El hambre se le paso. Ahora no quiere siquiera la manzana. Raffaella mira preocupada a la hija, después, mirándola así de sorprendida asume un tono calmado y tranquilo.

‘Babi, por favor, puedes contarme que paso?’

Babi alza los ojos. Son claros y miedosos. Es como si la viera por la primera vez esa noche. Comienza con un ‘nada mama’ y sigue adelante contándoles todo. La fiesta, los desastrosos, Chicco que llamo a la policía, ellos que hicieron como que huían pero que los esperaban abajo escondidos. El seguimiento, la BMW destruida. Chicco que se para, aquel muchacho con la moto azul que lo golpeo, Accado que interfiere y que ese muchacho también lo ha golpeado a el.

‘Pero como, y Accado te dejo con ese vándalo? Con ese violento y no te saco de ahí?’

Raffaella esta estupefacta. Babi no sabe que responder.

‘Quizás pensó que era un amigo mío, que se yo. Se solo que después de los golpes escaparon todos y quede sola con el.’

Claudio mueve la cabeza.

‘Claro que Accado escapo. Podía morir desangrado con esa nariz rota. Igual ya todo acabara con ese muchacho. Filippo lo denuncio. Hoy vinieron a mi oficina a contarme toda la historia. Dijeron que procederán por vías legales. Quieren saber el nombre y apellido de ese muchacho. Como se llama?’

‘Step.’

Claudio mira perplejo a Babi.

‘Como Step?’

‘Step. Así se llama. Al menos, siempre escuche que le dijeran así.’

‘Que, es americano?’

Daniela interviene.

‘Como va a ser americano papa! Es un apodo.’

Claudio mira a las hijas.

‘Pero este muchacho tendrá también un nombre?’

Babi le sonríe.

‘Claro que lo tendrá, pero yo no lo se.’

Claudio pierde de nuevo la paciencia.

‘Y como yo les digo a los Accado que mi hija sale a pasear con uno que no sabe como se llama.’

‘Yo no paseo con el. Estaba con Chicco… ya te lo dije.’

Raffaella interviene.

‘Si, pero después regresaste a casa en moto con el.’

‘Mama, si Chicco y los Accado habían escapado, como regresaba? Estaba ahí en la calle, de noche? Que hacia, regresaba a casa sola? Lo intente. Pero después de un rato se paro un loco con una Golf a fastidiarme, y me deje acompañar.’

Claudio no cree lo que oye.

‘Entonces a este Step le debemos agradecer entonces!’

Raffaella mira molesta a sus hijas.

‘No podemos dar esa imagen. Entendieron? Quiero saber rápido el nombre del muchacho. Esta claro?’ Babi se acuerda de esa mañana cuando hablaba con Daniela. Era muy temprano, ella tenia sueño todavía, pero no tiene dudas.

‘Dani, tu sabes como se llama. Dile!’

Daniela mira a Babi alterada. Pero que, esta loca? Decirlo? Denunciar a Step? Recuerda eso que le hicieron a Brandelli y muchas otras historias que ha escuchado. Le destruirían la Vespa, la golpearían. Escribirían cosas terribles en los muros de la escuela con su nombre y cosas que ni siquiera había hecho todavía. Denunciarlo?

En un solo segundo pierde la memoria.

‘Mama, yo solo se que se llama Step.’

Babi arremete contra la hermana.

‘Mentirosa! Eres una mentirosa! Yo no lo recuerdo, pero esta mañana me dijiste como se llamaba. Tu y tus amigas lo conocen muy bien.’

‘Pero que dices?’

‘Eres mala, no lo dices porque tienes miedo. Tu sabes como se llama.’

‘No, no lo se.’

‘Si que lo sabes!’

Babi de repente se detiene. Es como si algo en su mente se hubiera abierto, aclarado. Lo recuerda.

‘Stefano Mancini. Eso es su nombre. Lo llaman Step.’

Después mira a la hermana y cita sus palabras: ‘Yo y mis amigas le decimos 10 con honores.’

‘Así es Babi.’ Claudio saca del bolsillo una libreta donde siempre anota todo. Escribe el nombre antes de que se le olvide. Mientras escribe esta nerviosa. Leyó algo que debió haber hecho, pero ya es muy tarde.

Daniela mira a la hermana.

‘Te sientes orgullosa no? No entiendes que te harán? Te destruirán la Vespa. Te golpearan, escribirán acerca de ti en los muros de las escuela.’

‘Ve, la Vespa ya esta destruida. En los muros dudo que escriban algo, también porque no creo que alguno de ellos sepa escribir. Y si me quieren lastimar, mi papa me protegerá, verdad?’

Babi se gira hacia el. Claudio piensa en Accado, imagina el dolor que debe ser que te fracturen la nariz.

‘Claro Babi, aquí estoy yo.’

Se pregunta cuando será verdad esa afirmación. Quizás poco. Pero sirvió en el momento. Babi, ahora más tranquila, va a la cocina. Agarra su manzana verde y la lava de nuevo. Después, teniéndola agarrada en el vacío por la ramita que le sobresale, comienza a girarla. Cada giro, una letra. Cuando la ramita se suelta, esa, aquella es la inicial de alguien que piensa en ti. A, B, C, D. La rama se suelta con un sonido seco.

Salio la D. Quien conoce que inicie por D? Nadie, no le viene a la mente nadie. Por suerte no salio la S. Es difícil que esa ramita resista tanto. Pero aun si hubiese salio esa letra no se habría preocupado tanto tampoco. No tiene miedo. Babi pasa frente a su madre. Le sonríe. Raffaella la mira alejarse. Esta orgullosa de su hija. Babi si que salio como ella. No como Daniela. El miedo que tiene se justifica. Daniela es toda como su padre. Claudio pone su traje gris en la cama.

‘Tesoro, me compraste la cafetera grande?’

‘No, me olvide.’

Raffaella se encierra en el baño. Pero como, piensa Claudio, lo anote en la lista del mercado. Decide no decir nada, justificando así aun más el carácter de Daniela. Claudio, elige una camisa, la echa en la cama. Después lanza también su corbata preferida. Quien sabe, quizás esta noche podrá ponérsela.

Los padres salen, aconsejándoles como cada noche de no abrirle a nadie. Pronto después Babi baja en pijama y sin hacerse ver, esconde las llaves de la casa bajo la alfombra de la puerta. Quien sabe donde esta Pallina en ese momento. En la carrera de motos en la Olímpica. Quizás contenta.

Daniela esta en el corredor. Habla con Andrea Palombi en el teléfono mientras con un lapicero garabatea sus nombres y algunos corazones en una hoja. Andrea, escuchando que Daniela no le responde, se intriga.

‘Danie, pero que estas haciendo?’

‘Nada.’

‘Como que nada? Siento sonidos.’

‘Estoy escribiendo.’

‘Ah, y que escribes?’

‘Nada…’ miente. ‘Estoy haciendo dibujos.’

‘Ah, entiendo. Y tu dibujas cuando hablas conmigo?’

‘No, te escucho. Entendí todo.’

‘Entonces repite.’

Daniela suspira.

‘El lunes, miércoles y viernes vas al gimnasio y el martes y jueves a ingles.’

‘A que hora?’

Daniela piensa un momento.

‘A las cinco.’

‘A las seis. Ves que no escuchas?’

‘Claro que si, es que no lo recuerdo. Entendiste porque antes no podía hablar?’

‘Si porque estaban tus padres y se estaban despidiendo.’

‘Exacto: te decía si, aja, ehm. Y tu no entendías!’

‘Como puedo entender si no me lo dices?’

‘Como puedo decírtelo si ellos estaban enfrente mío? Pero si eres terco! Tengo una idea: debemos decidir una palabra convencional para cuando no podamos hablar.’

‘Como…?’

‘Que se yo, pensemos…’

‘Podemos decir el nombre de mi escuela de ingles.’

‘Cual es?’

‘Viste que no me escuchabas! British.’

‘Si, British me gusta.’

Babi pasa en ese momento y se para frente a la hermana.

‘Es posible que siempre estas en el teléfono?’

Daniela no le responde. Decide usar rápido la nueva palabra.

‘British.’

Andrea se mantiene por un momento perplejo. ‘Que pasa, no puedes hablar?’

‘Claro! Si no porque diría British? Así, de la nada. Entonces no lo habíamos decidido así?’

‘Esta bien, pero como se yo que ahora no puedes hablar?’

‘Eh no, lo debes saber. Dije British.’

‘Si, pero pensé que quizás estabas probando como sonaba.’

Su discusión que no era precisamente algo como metafísica fue interrumpida de repente por la voz de una señorita de Telecom.

‘Atencion. Llamada local urgente para el numero…’

Daniela y Andrea se quedan en silencio. Escuchan las primeras cifras que decidirían a cual de los dos es el que lo están buscando. ‘3… 2…’

Daniela cubre la voz de la señorita. ‘Es para mi. Debe ser Giulia!’

‘Hablamos después?’

‘Si, te llamo cuando termine. British!’ Andrea ríe. En ese caso quiere decir algo más o menos como ‘te quiero mucho’.

‘Yo también.’ Cuelgan. Babi mira a la hermana. Extraño que haya terminado así rápido.

‘Han hecho una llamada loca urgente.’

‘Me parecía! Es muy extraño que tú termines solo porque yo te lo dije. Serán papa y mama molestos que deben decir algo y siempre consiguen ocupada la línea.’

‘Como va a ser! Seguramente es Giulia. Habíamos quedado en que hablaríamos después.’

Se mantienen esperando en silencio cerca del teléfono. Listas para alzarlo en el primer timbrazo. Como dos participantes en un quiz televisivo donde debes presionar primero el botón y dar la respuesta exacta. El teléfono suena. Daniela es más veloz.

‘Giulia?’ Respuesta equivocada. ‘Ah, discúlpeme, si ya se la paso. Es para ti.’ Babi le quita el auricular de las manos de Daniela.

‘Si, Alo?’

Ese sentimiento de satisfacción se vuelve rápido una pena grave. Es la madre de Pallina. Daniela sonríe. ‘No tardes tanto, ok?’

Babi trata de darle con una patada. Daniela la esquiva.

Babi se concentra en la llamada. ‘Ah, si señora, buenas noches.’ Escucha a la madre de Pallina. Naturalmente quiere a su hija. ‘Verdaderamente esta durmiendo.’ Después, arriesgando como nunca: ‘Quiere que la despierte?’ Babi entrecierra los ojos y aprieta los dientes esperando la respuesta.

‘No, no te preocupes. Te lo puedo decir a ti.’

Ya paso todo.

‘Mañana en la mañana logre hacer la cita para el análisis de sangre. Así que debes decirle que no coma nada desde que se levante y que la vengo a buscar yo a las siete. Entrara a la segunda hora, si no se hace muy tarde.’ Babi ahora esta relajada.

‘Si, de todas formas a la primera hora es religión…’ Babi piensa que esa materia para su amiga es del todo inútil. El alma de Pallina, entre mentiras y novios violentos, ya se perdió completamente.


Date: 2016-01-05; view: 507


<== previous page | next page ==>
TRES METROS SOBRE EL CIELO 8 page | TRES METROS SOBRE EL CIELO 10 page
doclecture.net - lectures - 2014-2024 year. Copyright infringement or personal data (0.023 sec.)