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Del nacimiento a la Edad Media

Conceptos

1. Sustrato: influencias lingüísticas que se incorporan al latín vulgar de los romanos que se encuentran en este territorio y que provienen de las lenguas que ya había, anteriores a la romanización.

2. Superestrato: influencias posteriores a la romanización que se incorporan a la lengua catalana a partir de las invasiones de los pueblos germánicos y árabe.

3. Adstrato: aportaciones lingüísticas de las lenguas vecinas.

La realidad lingüística prerromana de Cataluña, la Comunidad Valenciana y las Islas Baleares

Del 1000 al 218 a. C. se establecen en el territorio que actualmente ocupan Cataluña, la Comunidad Valenciana y las Islas Baleares diversos pueblos, que hablaban lenguas diferentes: los sorotaptos, los celtas, los fenicios, los griegos o los iberos. Éstas son las lenguas que conformar el sustrato catalán.

En 218 a. C. los romanos desembarcaron en Ampurias. Su lengua, el latín, será de donde nacerá la lengua catalana.

La romanización y la sustitución lingüística por el latín

A pesar de haber desembarcado en 218 a. C., la romanización del territorio no comenzó hasta el siglo I a.C., y el centro fue Tarragona. Por "romanización" se entiende el proceso de implantación en el territorio de la cultura, las leyes, las costumbres y la lengua del Imperio Romano, que era el latín. No obstante, la romanización de Cataluña no fue uniforme y hubo zonas profundamente romanizadas, como elEmpordán, junto a otras zonas de romanización menos intensa, como la zona de Olot.

Poco a poco se produjo un cambio lingüístico en estos territorios, y después de una etapa de bilingüismo entre el latín y las lenguas indígenas, el latín se acabó imponiendo. A pesar de eso, se observa que el latín hablado en cada territorio tenía particularidades fruto de del sustrato de las lenguas indígenas que se hablaban. De esta forma, desde un primer momento hay difrences entre el latín hablado en la Península Ibérica y el de Italia. Y aún, dentro del latín de la Península también había diferencias según zonas. Los hablantes, sin embargo, no tenían conciencia de estas diferencias.

El latín y la formación de la lengua catalana

El Imperio Romano, a lo largo del siglo V, comenzó a descomponerse, y también la unidad que representaba el latín, dando paso al nacimiento de las lenguas románicas, algunas de la cuales son: el galaico-portugués, el español, el catalán, el occitano, el francés, el sardo, el italiano, el rumano y el retorrománico (en el cantón suizo de los Grisones).

El conjunto de estas lenguas, o el lugar donde se hablan, es el que se conoce como Romania. La Romania se divide en dos bloques:



1. El oriental: Italiano y rumano.

2. El occidental: Portugués, castellano, catalán, occitano, francés, sardo y retorrománico.

El catalán presenta ciertas características similares a sus lenguas vecinas (el aragonés y el occitano). En esta sección se presentarán las características que hacen único al catalán en su evolución a partir del latín vulgar así como las características comunes con otras lenguas románicas. El catalán tiene una mayor relación con el occitano, sin embargo, cuando las relaciones culturales se acabaran en el primer milenio, el catalán se fue ligando cada vez más a las lenguas iberorrománicas (las cuales son más conservadoras que el francés).

Características comunes con las lenguas romances occidentales, pero no con las italorrománicas

· Sonorización (y lenición) de -p-, -t-, -c- intervocálicas en -b-, -d-, -g- (capra 'cabra' → cabra, catēna 'cadena' → cadena, secūrvs 'seguro' → segur).

· La pérdida de la geminación en consonante oclusivas.

· Desarrollo de /ts/ (más tarde /s/) en vez de /tʃ/ de la /k/ palatalizada. Por ejemplo, caelvm ('cielo') → catalán antiguo cel /tsɛl/ → moderno [ˈsɛɫ] (cf. italiano cielo /tʃɛlo/).

· Desarrollo de c en ct, cs en /j/ palatal (vs. /tt/, /ss,ʃʃ/ en italiano).

· Pronunciación apicoalveolar de /s/ y /z/. (Esta fue una vez común a todas las lenguas romances occidentales, pero ha desaparecido en francés, en algunos dialectos del occitano y en portugués).

Características comunes con las lenguas galorrománicas

· Caída de las vocales átonas finales excepto a (mūrum*muromur, flōremflor); cf. el mantenimiento de todas las vocales finales ( italiano muro, fiore). El resultado finas de las obstruyentes sonoras es el ensordecimiento: frigidvs ('frío') → fred [ˈfɾɛt] o [ˈfɾet]. Sin embargo, las fricativas sonoras finales se ensordecen ante vocales y ante consonantes sordas (asimilación regresiva de sonoridad): els homes 'los hombres' [əɫs] + [ˈɔməs] → [əɫˈzɔməs]; peix bo 'pez bueno' [ˈpe(j)ʃ] + [ˈbɔ] → [ˈpe(j)ʒˈβɔ]. (Las misma obstrucción final ocurre en todas las lenguas romances occidentales mientras los obstruyentes sean finales, aunque esto es raro en las lenguas iberorrománicas). Cf. portugués luz "luz" /lus/ vs. luzes "luces" /ˈluzɨs/,/luzis/, español antiguo relox "reloj" /reˈloʃ/ vs. relojes "relojes" /reˈloʒes/.) (Mantenimiento aparente de -o en la primera persona del singular y de -os en los plurales son desarrollos secundarios: el catalán antiguo no posee primera persona del singular en -o, y el -os para los plurales ocurre sin justificación etimológica, e.g. peixos "fishes" < PISCĒS, cf. Portuguese peixes.)

· Diptongación de /ɛ/ y /ɔ/ ante consonantes palatales (con la consiguiente pérdida de la vocal media si se produce un triptongo). En español no hay diptongación. (Pero la diptongación entre palatales ocurre en aragonés). Latín coxa 'thigh' → */kuoiʃa/ → cuixa (cf. francés cuisse pero portugués coxa). Latín octō 'ocho' → */uoit/ → vuit (cf. francés huit pero portugués oito, español ocho; antiguo occitano ambos ueit y och). Latín lectum 'lecho' → */lieit/ → llit (cf. francés lit pero portugués leito, occitano antiguoambos lieig y leit).

· Preservación de pl-, cl-, fl- iniciales (plicāre 'fold' → aplegar 'llegar', clavis 'llave' → clau, flamma 'llama' → flama); cf. palatalización de estos grupos consonánticos en españolllegar, llave, llama portuguéschegar, chave, chama. En el grupo italorromance esto remplaza la segunda consonante con una -i- [j]; por lo tanto en italiano piegare, chiave,fiamma.

Características comunes con el Francés, el portugués y el occitano pero no con el español

· /ɡ/ + yod o /e/ or /i/ inicial, /d/ + yod, /j/ → [dʒ]* → [ʒ] or [dʒ], en vez de la española /j/. El sonido se conserva en todos los casos, en vez de perderse en sílabas átonas: gelvm ('hielo') → gel [ˈʒɛɫ] or [ˈdʒɛɫ] (cf. español hielo /jelo/; pero en portugués gelo, occitano gel). iectāre ('echar') → *gieitargitar [ʒiˈta] or [dʒiˈta(ɾ)] (cf. portugués jeitar, occitano gitar, francés jeter).

· Antigua /dʒ/ permanece en la actualidad como /dʒ/ actual o /ʒ/, en vez del español /x/.

· Sibilantes sonoras permaneces como tales, mientras que en español se convierten en sibilantes sordas.

· /f/ inicial permanece, mientras que en español se convierte en /h/ antes de vocal (i.e. a menos que preceda a una /r/, /l/, /w/, /j/). (En gascón de hecho se desarrolla la /f/ en /h/ en todas las circunstancias, incluso ante consonantes o semivocales).

· /l/ + yod intervocálica (-li-, -le-), -cl- → ll [ʎ] en vez de j ([(d)ʒ] español antiguo, [x] moderno): muliere 'mujer' → muller, oricla 'oreja' → orella, veclu 'viejo' → vell. Cf. portuguésmulher, orelha, velho, occitano molher, francés oreille, vieil).

· Desarrollo de -ct- a /(j)t en vez de un desarrollo mayor a /tʃ/. Tanto el español como el occitano meridional (los dialectos más cercanos al catalán) tienen /tʃ/, pero el occitano septentrional, el francés, y todas las lenguas iberorrománicas (portugués, leonés, aragonés) tienen /(j)t/. E.g. lactem*lleitllet (Cf. español leche, occitano meridional laich, occitano septentrional lait, francés lait, portuguésleite).

Características comunes con las lenguas occitanorrománicas

· Preservación de -e- y -o- tónicas del latín vulgar (ĕ y ŏ), [ɛ] y [ɔ] respectivamente (terra 'tierra' → terra, mele 'miel' → mel, focum 'fuego'→ foc [ˈfɔk], bovem 'buey'→ bou [ˈbɔw]); cf. mientras que en español diptonga en tierra, miel, fuego, buey. El francés diptonga las sílabas abiertas, así miel, francés antiguo buef (moderno boeuf /bœf/, pero terre sin diptongo). Esta misma preservación también ocurre en portugués (terra, mel, fogo, boi). Nótese que el occitano, pero no el catalán, diptonga estas vocales ante consonantes velares, i.e. /k/, /ɡ/, /w/: terra, mel, pero fuec, bueu.

· Desarrollo de /v/ final en /u/: navem 'nave' → nau (cf. occitano nau, francés nef); brevem 'breve' → breu (cf. occitano breu, francés bref, español no final breve).

· Caída de -n en final de palabra (en un principio intervocálica): panis ('pan') → pa, vinvm ('vino') → vi. (En algunos dialectos del occitano, e.g. provenzal, la consonante no se pierde.) No ocurre así en Languedoc y en catalán septentrional, donde los plurales conservan esta [n]: pans, vins.

· Fusión del protoromance occidental /ð/ (de la -d- intervocálica) y /dz/ (de -ty-, -c(e)-, -c(i)- intervocálicas). El resultado fue en un principio /z/ o /dz/, aún preservado en occitano y parcialmente en catalán antiguo, pero en catalán moderno pasó a /w/ o se perdió.

Características comunes con el español pero no con el occitano

· Preservación de /u/ y /o/ de romance occidental como [u] y [o], en vez del galorrománico [y] y [u], respectivamente (también en portugués). En latín (lūna 'luna' → lluna [ˈʎunə]o [ˈʎuna/ɛ], occitano luna [ˈlynɔ], francés lune [lyn]. Latín (duplum 'doble' [ˈdoβle] → doble [ˈdobːɫə] o [ˈdoβle], occitano doble [ˈduble], francés double [dubl].

· Desarrollo de -au,ai- en /ɔ,e/ en vez de la preservación de /au,ai/ (pero el portugués tiene /ou,ei/). E.g. caulem 'cabbage' → col, paucum 'poco' → poc. (Lo mismo ocurre en francés).

· Palatalización de -x- /ks/, -sky- /skj/, -ssy- /ssj/ en [(j)ʃ] (también en portugués). Latín coxa 'thigh' → cuixa, portugués coxa vs. francéscuisse. Latín laxāre → catalán y portugués deixar, español antiguo dexar, pero francés laisser, occitano antiguo laisar. Latín bassiāre → catalán y portugués baixar, español antiguo baxar, pero francés baisser.

· -ll- intervocálica → ll [ʎ]: caballumcavall (cf. español caballo con [ʎ] aún preservado en distritos rurales conervadores en España; portugués cavalo, occitano caval, francéscheval, todos con /l/ simple). En algunos casos, /l/ aparece como resultado de una simplificación temprana de -ll- después d euna vocal larga: vīlla 'villa' → vila; st(r)ēlla'estrella' → catalán occidental estrela, oriental estrella (cf. portugués estrela < -ll- pero francés étoile < -l-).

· Reducción del grupo consonántico -mb-m: camba 'pierna' → cama, lumbum 'lomo' → llom, columbum 'paloma' → colom (cf. portugués lombo, pombo/pomba). Ocurre en algunos dialectos occitanos (gascón y Languedoc meridional).

Características que no están en español o (la mayoría de) occitano, pero sí en otras lenguas minoritarias románicas

· Reducción del grupo consonántico -nd- a -n- (camba 'cama' → cama, mandāre 'mandar' → manar). Compárese la reducción de -mb- a -m-. También se encuentra en gascón y en Languedoc meridional.

· Palatalización de l- inicial (lūna 'luna' → lluna, lvpvs 'lobo' → llop). Esta característica se puede encontrar también en el dialecto de Foix del occitano y en asturleonés.

· Palatalización de -sc- ante -e,i- en [(j)ʃ]. Especialmente visible en verbos de la tercera conjugación (-īre) que toman lo que originalmente era un infijo incoativo (-ēsc-/-īsc-), e.g.servēscit 'serves' (3ª persona del singular del presente de indicativo) → serveix/servix. También se da en aragonés, leonés y en algunas palabras del portugués. (En portuguéspiscem 'pez' → peixe, miscere 'mezclar' → mexer, pero la mayoría de los verbos en -scere acaban en (s)cer, e.g. crēscere 'crecer' → crescer, nascere 'nacer' → nascer,*offerescere 'ofrecer' → oferecer.)

Características únicas no encontradas en otras lenguas

· Desarrollo inusual temprano de /(d)z/,resultado de la fusión de /ð/ del protorromance occidental (de -d- intervocálica) y /dz/ (de -ty-, -c(e)-, -c(i)- intervocálicas); véase arriba la nota sobre un proceso similar en occitano. En antiguo catalán temprano, se convierte en /w/ en posición final o ante consonante, permaneciendo como /(d)z/ entre vocales. En antiguo catalán tardío, /(d)z/ se pierde entre vocales:

· pedem 'pie' → peu

· crucem 'cruz' → creu, crēdit '(él) cree' → (ell) creu

· Verbos de la segunda persona del plural acabados en -tis: mirātis 'miráis' → *miratzmiraumireu/mirau

· ratiōnem 'razón' → *razóraó

· vicīnum 'vecino' → *vezíveí

· recipere 'recibir' → *rezebrerebre

· Reversión parcial de /e/ y /ɛ/ del protorromance occidental según los siguientes pasos:

· (1) /e/ acentuada → /ǝ/ en la mayoría de los casos

· (2) /ɛ/ acentuada → /e/ en la mayoría de los casos

· (3) /ǝ/ acentuada se mantiene en las islas Baleares; /ǝ/ → /ɛ/ (en catalán oriental, es decir, el estándar); /ǝ/ → /e/ (en catalán occidental).

· Desarrollo secundario de consonantes dobles (/ll/, /mm/, /nn/, /ʎʎ/): septimāna ('semana') → setmana [səmˈmanə], cutina de cvtis ('corteza') → cotna [ˈkonːə], modulum('molde') → motlle/motle [ˈmɔʎːə]/[ˈmɔlːe]. Más tarde aumentada mediante préstamos del latín clásico (latinismos): athlēta ('atleta') → atleta [əɫˈɫɛtə], intelligentem('inteligente') → intel·ligent [intəɫːiˈʒen(t)].

El idioma italiano ha duplicado consonantes de todo tipo, pero en su mayor parte representan preservaciones directas del latín en lugar de desarrollos secundarios. Las geminadas en latín vulgar /ll/, /rr/, /nn/ y a veces /mm/ se desarrollaron de manera diferente en las distintas lenguas romances occidentales de las consonantes individuales correspondientes, pero de maneras divergentes, lo que indica que las formas geminadas deben haberse conservado en la formas medievales tempranas de esos idiomas, incluso después de que las geminadas obstruyentes se perdieran. Algunos dialectos del aragonés (una lengua hermana del catalán) todavía conservan /ll/ como el reflejo de la /ll/ latina. Las resonantes gmeinadas catalanas modernas no descienden de estas geminadas medievales (/ll/, /mm/, /nn/ geminadas → /ʎ/, /m/, /ɲ/), sino que el desarrollo de las geminadas resonantes secundarias puede haber sido influenciado por los dialectos cercanos donde aún se mantienen las geminadas originales o por otras geminadas secundarias que se deben haber existido en un momento dado (por ejemplo, duodecim → protorromance occidental /doddze/, donde el resultado de /ddz/ se distingue de la simple /dz/ en catalán, occitano y francés, y donde el resultado douze francés, sin diptongación, indica claramente una consonante geminada).

El catalán preliterario

Durante este periodo, que comienza con la llegada de los germanos a la Península Ibérica, el catalán se fue desarrollando como lengua oral, separándose del latín e irá tomando préstamos tanto de las lenguas germánicas como del árabe.

Las invasiones germánicas

Aprovechado la decadencia del Imperio Romano, los visigodos comenzaron a ocupar territorios dominados hasta entonces por losromanos. Esto duraría desde el siglo V al VII. El legado lingüístico de estas invasiones formará parte del superestrato de la lengua catalana.

La invasión musulmana

En el siglo VIII se produjo la invasión musulmana de la Península Ibérica. Pronto, sin embargo, los francos de Carlomagno iniciaron un proyecto de reconquista para asegurarse una zona de seguridad ante el avance musulmán. Nació así la "Marca Hispánica" y la reconsquista llegó hasta Barcelona (801), comprendiendo los territorios que se conocen como Cataluña la Vieja. La reconquista de los territorios del sur de Cataluña, Cataluña la Nueva, se hicieron esperar hasta el siglo XII.

La influencia de las lenguas germánicas y del árabe sobre el latín/catalán que se hablaba en estos territorios influyó de manera diferente: el árabe tuvo mucha más influencia sobre el catalá hablado en Cataluña la Nueva, bajo dominio musulmán durante muchos más años que no Cataluña la Vieja, donde muy poca influencia encontramos en el superestrato.

La formación de la lengua literaria

La conciencia de diferenciación lingüística latín/catalán[editar · editar código]

Durante este periodo asistimos a los grandes cambios que se producen en el latín vulgar y que propician la formación de las lenguas románicas. Gracias al esfuerzo deCarlomagno se produjo dentro del Imperio Carolingio, del cual formaba parte la "Marca", un renacimiento intelectual (la "Renovatio carolingea") que promovía el renacimiento de la cultura latina cristiana.4 Para hacerlo efectivo, se propuso el restablecimiento del latín culto.

El resultado de este intento fue que la inmensa mayoría de la gente no entendía lo que se le decía, y comenzó a tomar conciencia de que aquel latín que pensaban que hablaban había evolucionado hasta el punto de convertirse en una lengua completamente diferente. Desgraciadamente, y aunque se piensa que la lengua catalana siguió una evolución paralela a la del resto de las lenguas románicas, la documentación que ha sobrevivido no es directa, y no explicita la conciencia de diferenciación entre el latín y el primitivoromance catalán.

Por varios indicios, podemos afirmar que el catalán ya era hablado en este rincón de la Península hacia el siglo VIII d. C. Es decir, el latín hablado desde los primeros siglos de nuestra era había evolucionado bastante como para diferenciarse de la lengua vulgar de Roma y ser notablemente diferente. No obstante, los documentos de la época son escritos en latín (bastante degradado y en algunos aspectos cercano al catalán).

Los primeros testimonios de catalán escrito

En el siglo IX, en estos mismos documentos cotidianos (testamentos, actas, ventas, etc.) aparecen claramente palabras y construcciones catalanas, lo que ya nos indica que la lengua oral de quien redactaba es escrito era bien diferente de aquella en la que escribía.

Este mismo siglo se produce una decisión importante para las lenguas románicas: la Iglesia decidía en el Concilio de Tours del año 813que había que traducir las homilías in rusticam Romanam linguam para que los feligreses entendieran la Palabra.

En el siglo IX, aunque se encuentran escasas muestras de características típicas del catalán en medio de textos en latín, por ejemplo el nombre de Palomera en latín Palumbaria, encontrado en el acta de consagración de la Catedral de Urgell redactada en el último tercio del siglo IX. En otro texto, este ya de principios del siglo XI, aparece en medio de un texto latino, de 1034, el nombre de siete árboles frutales en catalán:

morers III et oliver I et noguer I et pomer I et amendolers IIII et pruners et figures

A finales del siglo XI se encuentran documentos feudals escritos íntegramente en catalán, mientras que a principios sólo aparecían palabras y expresiones. El manuscrito Greuges de Caboet es el texto más antiguo que se conserva totalmente en catalán, de temática feudal y fue escrito entre 1080 y 1095. Del 1098 data el Juramento de Pau y Tregua del conde Pere Ramon de Pallars Jussà al obispo de Urgell.

En el siglo XII encontramos otros documento feudales como los Agravios de los hombres de Sant Pere de Graudescales y los Agravios de los Hombres de Hostafrancs de Sión, que como los Agravios de Caboet, proceden del área antigua del Obispado de Urgell. En el mismo siglo surgen las primeras traducciones o adaptaciones de origen jurídico, como el Liber iudiciorum (Libro de los Juicios o Libro Juzgue) o Forum iudicum data paleográficamente de finales del siglo XII conservado en la Biblioteca de la Abadía de Montserrat y se cree que se una copia de una traducción de mediados del siglo XII mientras que otra versión catalana del mismo Liber iudiciorum que se conserva en el Archivo Capitular de Urgell, en Seo de Urgel, fecha de la primera mitad del siglo XII, paleográficamente y lingüísticamente.

En el siglo XIII surgen las Homilías de Organyà (comentario en catalán de unos pasajes del Evangelio, escritos en latín), consideradas el primer texto literario escrito originariamente en catalán, puesto que los anteriormente citados no son considerados literarios. Se trata de una colección de sermones conservada en esta población, que, junto con el Forum, se habían considerado tradicionalmente los primeros textos en catalán.

Hay que destacar también la Canción de Santa Fe, uno de los textos literarios más antiguos escritos en catalán u occitano. Fue escrita entre 1054 y 1076.

Se una hagiografía de Santa Fe de Agen contada en 593 versos octosílabos dividida en un número variable de coplas consonantes según las versiones (de 41 a 55).


Date: 2015-12-24; view: 673


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